viernes, 2 de octubre de 2009

¡ NO PASARAN!



El articulo que voy a escribir a continuación, es un extracto del libro de Germán Lopezarias , "EL Madrid del ¡No pasarán!. Se lo quiero dedicar, a esas nacionalidades y nacionalistas, que culpan de todo los males que les ocurre a Madrid. A esos nacionalistas y nacionalidades, que piensan que sus ciudades fueron las mártires de nuestra Guerra Civil y de los años que la siguieron. A esas nacionalidades y nacionalistas, que se creen que la ciudad de Madrid es el demonio por el echo de que tengamos aquí las sedes del Jefe del Estado y del Gobierno de la nación.

Durante tres años el pueblo madrileño -el de la verbena de la Paloma Y Agua, azucarillos y aguardientes, pero también el del Dos de Mayo- vivió una gesta con pocos precedentes en la historia de la humanidad. Mucho se ha escrito sobre el sitio de Zaragoza o de Numancia, pero poco se ha contado del asedio de Madrid, donde hombres y mujeres, sin distinción de colores, vivieron días de angustia soportando bombardeos, hambre, frío, naciendo entre escombros, muriendo entre cascotes. El espectáculo sobrecogedor de la ciudad martirizada, que había pasado, sin saberlo, del sainete a la tragedia griega llevada hasta las ultimas consecuencias.
A lo largo de mil días, la vida siguió adelante por inercia y el hombre continuo sus tareas por instinto de conservación. Se incorporaron nuevas normas a la rutina diaria. Se convirtió en costumbre bajar a los refugios, correr por las calles para guarecerse de las bombas, aguantar en las colas bajo la amenaza real de los proyectiles, escuchar el aullido de la alarma aérea, buscar a los muertos entre los edificios desgajados, fumar cáscara de patata, hacer jabón y pan en las casas, comer lentejas con gusanos. A este abanico variopinto y siniestro de las nuevas rutinas se adapto rápidamente el madrileño, en un afán desmedido de supervivencia. A estas alturas no se puede comprender aun como un Madrid sin preparación militar pudo resistir en Noviembre del 36 el ataque de un ejercito equipado, disciplinado y preparado para la guerra. Ni se puede explicar tampoco como pudo soportar tres años de asedio en las mas adversas circunstancias. [...]de un Madrid insólito donde se dieron cita los mayores absurdos y donde, en la anarquía de la guerra, el miedo se enseñoro del animo de todos haciendo héroes a la fuerza y convirtiendo a los madrileños en protagonistas de una gesta sin precedentes en la historia del mundo y de las guerras.

Extracto del prologo del libro, "El Madrid del ¡No pasarán!", del escritor Germán Lopezarias.

2 de octubre de 2009.

1 comentario:

Psychedelic Rojilla dijo...

Pues hombre, yo creo que poco precisamente no se ha hablado de la resistencia madrileña, eh..