A raíz de las ultimas elecciones vascas, escribí un articulo titulado,"Euskadi, tiempo de esperanza. ¿Y de dolor?", en el que comentaba que se abría un tiempo para la esperanza con un gobierno no nacionalista, pero que eso no lo iban a encajar bien los mas radicales. Hoy,esta banda de asesinos, hijos de puta y cobardes, han vuelto a matar, y lo hacen como siempre, sin dar la cara y de la forma mas ruin.En la localidad vizcaína de Arrigorriaga, y por medio de un coche bomba han asesinado al inspector de la Policia Nacional,Eduardo Puelles, de 49 años de edad, y tan vasco como lo puedan ser estos asesinos. Se sabe que la banda esta debilitada, pero matar y de la forma que lo hacen estos individuos no es difícil. Se autodenominan Gudaris "soldados", pero matan por la espalda o a distancia, por que no tienen cojones.¡Menudos soldados¡, que cuando se ven atrapados por las fuerzas de seguridad del Estado o por la Policía Autónoma se cagan por las patas abajo. Es hora de que los nacionalistas den pasos adelante, y no les pido que renuncien ni a sus ideas ni a sus objetivos, pero si les pido que salgan de la ambiguedad,que no den pábulo a los asesino y que los señalen como enemigos de Euskadi, país de los vascos nacionalistas o no nacionalistas.Egibar, uno de los miembros del núcleo duro del PNV,a condenado energicamente este atentado, y le pide a la izquierda abertzale que rompa ese silencio y deje de jugar con lo ambiguo, que haga política y se aleje de los violentos. Cuando escribo tras un atentado, siempre deseo que sea la ultima vez,pero se que no va ha ser así, que aun se van a derramar muchas lágrimas, pero que no duden estos hijos de puta que vamos acabar con ellos.
19 de junio de 2009
Antonio Armero Rodriguez.
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